El Consejo de Transporte de Mercancías de la Organización Internacional del Transporte (IRU), de la que forma parte la CETM, reclama la actuación de los Gobiernos para solucionar la crisis de la cadena de suministro.

La Organización, que representa a más de 3.5 millones de empresas de transporte y logística, considera que los Gobiernos deben actuar con urgencia puesto que nos encontramos ante “una crisis sin precedentes” y el aumento dramático de la demanda, las restricciones del Covid-19, la escasez de conductores y el aumento de los precios de los combustibles, están creando “una tormenta perfecta”.

Desde el inicio de la pandemia, la industria del transporte por carretera se ha visto fuertemente afectada por pérdidas económicas, que se espera que alcancen 1 billón de dólares este año. Ante este panorama, las empresas del sector, columna vertebral de las cadenas de suministro, necesitan más apoyo financiero para evitar su quiebra y estabilizar el sistema de transporte en su conjunto. Por ello, el Consejo de Transporte de Mercancías de la IRU plantea las siguientes medidas:

  • Restaurar los flujos comerciales con digitalización del transporte por carretera: los Gobiernos deben acelerar el uso y la implementación de la Convención CMR de las Naciones Unidas y el Protocolo e-CMR, que no requieren controles físicos y, por tanto, reducen el contacto entre personas en las fronteras.
  • Abandonar las equivocadas guías de restricciones del Covid-19: la IRU y otras organizaciones ya advirtieron a la Asamblea General de la ONU sobre un colapso del sistema de transporte global. Los Gobiernos deben abandonarlos controles fronterizos y las restricciones a la conducción que son innecesarios, con el fin de restablecer la libertad de movimiento de los trabajadores del sector, que son esenciales y deben tener prioridad a la hora de recibir las vacunas reconocidas por la OMS.
  • Luchar contra la escasez crónica de conductores: a nivel mundial, el24% de los puestos de conductor siguen sin cubrir. Los Gobiernos deben implementar los 18 años como la edad mínima para convertirse en conductor profesional, facilitar la formación, los procesos de visado del conductor y la atracción de mujeres a la profesión.
  • Nivelar los altos precios del combustible: el precio del barril del petróleo, el gas natural y el AdBlue se han duplicado al menos durante las últimas semanas, lo que ha supuesto una carga financiera sustancial para las empresas de transporte por carretera y ha tenido un impacto directo en los clientes y los productos. Al operar con márgenes bajos, las empresas de transporte se verán obligadas en última instancia a dejar de prestar servicios a los clientes. Los gobiernos deben nivelar los precios del combustible congelando o ajustando los impuestos y cargas correspondientes. Las reservas nacionales de combustible de diésel deben liberarse cuando sea necesario.

Desde la CETM apoyan las medidas que plantea la IRU puesto que, de no abordarse la crisis que sufre la cadena de suministro, la recuperación económica mundial estará en peligro. Es necesaria una acción inmediata por parte de los Gobiernos para garantizar el suministro y la supervivencia de un sector que es imprescindible.